Un lugar oscuro y frío, una especie de amplio salón que solamente tiene un par de asientos, una pequeña silla en la que te encuentras “cómodamente” sentado y frente a ti, una lujosa y amplia silla negra con decorados en dorado, pero esa silla tampoco está vacía… en ella se encuentra una persona, una que no puedes ver con claridad por la oscuridad que cubre la habitación, además de que dicha persona viste por completo de negro, cubriendo su rostro con una capucha del mismo color, solamente el brillo casi plateado de sus ojos y algunos de sus mechones de cabello negro pueden distinguir tus ojos.
Apoya su rostro sobre su mano derecha, pero sin dejar de mirarte de manera penetrante, entreabriendo a penas sus labios para dejar que las palabras salgan en un tono de voz grave y profundo, pero a la vez suave y tranquilo.
-En este pequeño mundo, tú eres aún más pequeño, piensa que estamos sujetos a lo que la naturaleza diga que seremos, y a lo que las asociaciones y convivencias lleguen, por su puesto nada es fácil, la vida no es fácil, y si crees lo contrario entonces estás mal-su voz sigue el mismo tono de voz monótono, hasta que finalmente se eleva repentinamente para decir lo siguiente- Ahora responde!…. –la fuerte voz vuelve a ser un leve murmullo sonando de vez en cuando autoritaria.
-¿Cómo te llamas?
- Le habían tenido sentado por mucho tiempo en aquel "cómodo" asiento, sintiendo como su nuca pesaba debido a la posición a la cual había estado por lo que le parecieron horas eternas. Si bien, su humor no era cándido en ese momento para escuchar discursos aburridos y mucho menos para que le subieran la voz y le mandaran. Ante aquella breve "introducción", permaneció en total silencio con los brazos cruzados y mirando fijamente a la persona que tenia ante el. - Levioth. - respondió brevemente, sin inmutar su expresión.-
Un breve silencio se forma, en espera de tu respuesta, inundando por completo el salón, en el que de por si no podía escucharse nada más, quizá solo tu propia respiración, y la de tu anfitrión.
-¿Cuál es tu edad, la que aparentas tener y la que de verdad tienes ?
-Rió brevemente ante la pregunta, para luego inhalar aire profundamente y responder- Aparento 25 aunque en realidad tengo 2,000 años de edad... -
¿A qué raza perteneces?
Lobo.
-Y ya que estamos en eso quiero saber cómo te consideras psicologicamente y... supongo que físicamente también-una breve mirada de inspección cae sobre ti, y sin importar lo obvio que la segunda pregunta parezca debes dar tu respuesta, así sea igual de obvia.-
- Arquea una ceja a manera de primera respuesta ante las preguntas formuladas-
Psicológicamente hablando... me considero firme en mis creencias y decisiones, suelo ser sereno ante casi todo lo que se presenta. Suelo ser confundido con una persona que nació en aquellos años de la Edad Media, tengo ideas muy anticuadas. No suelo ser muy expresivo en cuanto a gestos se refieren, soy parco de palabra al igual, no soy alguien con a fin a conversaciones banales, se puede decir que soy un hombre de...¿pocas palabras?. - junta sus dedos en un agarre, recargando sus codos en sus rodillas, con expresión pensativa- Suelo parecer arrogante y frío... lo cual hay un poco de verdad en eso. Pienso antes de actuar, pero aveces la ira me domina por completo y actúo por inercia, aun así, es difícil que me saquen de mis cabales.
En cuanto físicamente... Mido 1, 88cm de estatura, soy de complexion delgada pero, no totalmente ya que poseo una musculatura apenas notable al llevar la ropa puesta. Cabellos son cortos, color azabache que caen estorbosamente sobre mi rostro, pero ya me he acostumbrado a tal incomodidad. Mi piel es pálida, debido a que no me expongo demasiado al sol y mi área de trabajos e realiza únicamente en las horas nocturnas. mis ojos, originalmente son azul turquesa, pero los confunden con grises la mayoría de las veces. Como puede ver, poseo un parche que mas sin embargo, no obstruye para nada mi capacidad visual. Si se me retirara ese parche, simplemente notarían mi mutación, conocida como hereocromía en mi ojo derecho, cuyo color es ocre brillante.
¿Cuál es tu puesto en esta sociedad y que empleo tienes? Todo, quiero saber hasta la más mínima cosa que realices, si tienes dos empleos o solo uno, si eres un respetado líder o escoria.
A la vista de la sociedad, Maestro de Raven Tail . Pero mi dedicación predilecta es el robarle tanto a ricos como a pobres, un ladrón nocturno. -sonríe ladino al final su respuesta-
¿Menciona a cada uno de tus familiares que aún vivan, y que parentesco tienes con ellos?
Fui unico hijo y abandonado por su madre a pocos años de nacido.
¿De las extrañas denominaciones “seme, suke y uke” cuál se adapta más a tí?
Suke
Crees tú que eres una parte importante de éste mundo? Si o no, realmente no me importa, mejor cuéntame tu historia…
Recuerdo haber nacido en una gran pradera, en invierno, nevaba, mas no a los rostros que me rodearon el día de mi nacimiento. MI madre me abandono a pocos años de haber nacido, dejandome en manos de una anciana loba. Mi infancia fue relativamente normal, siempre pretendí a estar solo, así que la anciana me educaba en casa, mientras los demás cachorros de la jauría aprendían en grupo. En fin...toda comodidad es retirada inmediatamente porque el lobo alfa me exilio, dando la excusa de que era poco productivo para apoyar a la jauría. Tenia la apariencia de un niño de 13 años cuando comenzé a vagar por este mundo, sobreviviendo excelentemente bien con mis instintos de cazador solitario. Estuve envuelto en varios problemas al enfrentarme descaradamente contra la autoridad, pero jamas lograron identificarme completamente, nunca me vieron la cara directamente. Finalmente, después de varios años "aburridos" decidí quedarme en un lugar fijo, ejerciendo de profesor, pero sin descuidar mi eterna diversión, "ser el cuerno que derriba las murallas de Jericó en un parpadeo", si...me gusta fastidiar de noche.
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Nombre real del personaje: Levioth
Anime, manga, videojuego al que pertenece: Maren Rokukishi
“Nuestro encuentro no fue solo una coincidencia, es algo llamado destino. Sólo yo entiendo tu dolor, tu tristeza, tu inseguridad y también tu soledad… lo diré las veces que quieras… ”